Cuando decidimos la mejor manera de medir un componente en una máquina de medición de coordenadas (MMC), se seleccionan muchas opciones de forma predeterminada. La especificación de precisión la MMC, el sensor más apropiado (de contacto o de exploración) y el método de inspección óptimo a menudo se dan por sentado y no se cuestionan. Sin embargo, estos fundamentos de buena metrología pueden verse perjudicados por una inapropiada o precipitada elección del palpador, que hacen que pueda comprometerse la exactitud de la medida.
En una máquina de medición de coordenadas (MMC) o un sistema de calibre Equator™, la limpieza de la bola del
palpador es imprescindible para conseguir unos resultados metrológicos repetibles. La acumulación de suciedad
en la bola del palpador por el uso habitual (principalmente durante el escaneado) puede generar malos resultados
metrológicos. La inspección y limpieza frecuente de la bola del palpador asegura la máxima precisión de los
resultados.